17/05/2013

Hay que tomarse el tiempo preciso para cada despedida.
Solo un abrazo y un adiós, sin lagrimas ni lamentos. Sin pañuelos blancos al viento.
Pero dos días y medio llorando por tu reciente ausencia.
Nos volveremos a ver, o eso quiero creer. No será dentro de dos o tres meses, sino dentro de dos o tres años. Pero sé, algo me lo dice, que no te olvidarás de mi ni yo de ti.
Hay muchas cosas que me gustaría haberte dicho. Nos quedaron muchos recuerdos que crear, muchas palabras que decir y muchos abrazos que dar.
Tranquila, algún día serán dados.

despedida: 13/05/2013

No hay comentarios:

Publicar un comentario